martes, 8 de diciembre de 2009

01:58, desenrrédame


Sonaba el maldito politono de aquel móvil. Incalculable sería la hora en que oía tu voz. Otra vez a tientas te reconocía en voz baja. Tú disimulabas que no me tenías, y yo hacía como si no te escuchaba. Lo malo es que nos quedamos ahí.
No volvimos a ultilizar la palabra nosotros, ni los simples aprecios. Ni siquiera volvimos a contar los kilómetros.
A día de hoy no recuerdo los ojos con los que te miraba, ni tus manos ardiendo debajo de la mesa.
Todo se quedó en el principio, de donde nada salió jamás. Atascado en el reverso de una historia sin ninguno de los dos. Nunca hubo doble ración de carretera y manta.

1 comentario:

  1. He de confesar que siempre he sido más de invierno,pero llevo una semana deseando que las hojas del calendario pasen deprisa y que se detengan en el mes de Julio y no sé por qué,nunca me había pasado :)
    Tu foto es tan cálida (L). El verano pasado me juré a mi misma que todas las mañanas me levantaría muy temprano e iría a andar en bicicleta para ver amanecer,pero mis pades no me compraron las ruedas (es que estaban pinchadas) a ver si éste lo consigo.

    "A día de hoy no recuerdo los ojos con los que te miraba, ni tus manos ardiendo debajo de la mesa." = (L). ¿Me da usted permiso para anotarla en mi lista de frases favoritas?
    Un beso muy muy grande Lily y nunca dejes de escribir porque no sabes la explosición de sensaciones que produces en mí.

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granitos de arena que se cuelan entre las sábanas