lunes, 18 de enero de 2010


Sé que en algún momento de tu imperfecta vida me buscaste con los ojos achinados en tu lista de contactos del chat. Y quizá en ese momento te entraba un cosquilleo si estaba presente, o de igual modo si me encontraba ausente. Y luego maldecías porqué coño te seguías acordando de mi, si ya era agua pasada.
Es gracioso que a veces sonría pensando que nos pasaba a los dos lo mismo.

1 comentario:

granitos de arena que se cuelan entre las sábanas