jueves, 3 de febrero de 2011

Por no entender, no entiendo ni porqué es necesario hacer la cama por la mañana, tener que desayunar sin hambre, los portazos a medio día sin mediar palabra. Por no querer entender, ni quiero saber porqué cada vez pasamos más frío, comemos sin ganas, o dejamos de mirarnos; porqué creo que no eres feliz, que no tiene solución o que no quieres que la tenga.
Por no saber no sé porqué no acabamos con esto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

granitos de arena que se cuelan entre las sábanas